Urcaguary, la divinidad tesorera

Debajo de nuestra tierra existe un mundo aparte, en el cual se pueden encontrar múltiples cosas que nadie creería encontrar. Ya sean ecosistemas, restos de fósiles y/o sitios arqueológicos sepultados por el tiempo, tumbas, catacumbas y como no, tesoros escondidos y objetos de gran valor. Es aquí cuando entra Urcaguary, la divinidad de los metales, las joyas y objetos subterráneos que son considerados de buen valor.

Urcaguary, la divinidad inca de los tesoros

Etimología

No está definido el origen del nombre Urcaguary, pero su nombre podría componerse de la palabra quechua Urqu, la cual significa montaña y de Wari, la cual tiene muchas interpretaciones. Entre estas interpretaciones, una de ellas menciona que Wari significa primitivo u originario. Estas dos palabras forman un posible significado para describir de manera acertada a la divinidad.

Historia

Urcaguary (conocido también como: Urkawari, Urkavari, Urqawari) es la divinidad inca de los metales, las joyas y los tesoros de cuantioso valor.

El culto que gira alrededor a Urcaguary no está completamente definido. Sin embargo, debido a los registros de criaturas de aspecto similar en el norte del Perú, Urcaguary pudo haber sido una divinidad venerada en dicho sector y que, cuando los incas iban expandiendo el Tahuantinsuyo por dicha zona, la divinidad pasaría a ser asimilada dentro del panteón oficial inca.

Representación

Urcaguary es una divinidad cuyo género es ambiguo, es decir, puede ser tanto una divinidad de género femenino o masculino.

Urcaguary está representado por una serpiente con cabeza de taruka (venado), lo cual le da un aspecto quimérico. Su extensa cola estaba enlazada con cadenas de oro y joyas.

Su cuerpo de serpiente es sumamente escurridizo, lo cual le ayuda a escabullirse debajo de la tierra. A raíz a esto, Urcaguary es una divinidad que reside en el Uku Pacha (la parte inferior del mundo).

Se piensa que, el motivo del porqué la divinidad posee cabeza de taruka, es debido a su forma de pensar. Esto coincide con el hábito de la deidad de permanecer debajo de la tierra.

Urcaguary, divinidad venado-serpiente

Importancia

Urcaguary era una deidad ctónica, es decir, que vive en lo que comprende al Uku Pacha (inframundo inca). Para ser más precisos, la deidad de los metales habita debajo de las montañas.

En dichas zonas, Urcaguary tiene como propósito de resguardar las joyas y tesoros escondidos de gente ávida que ose saquear dichos elementos.

Los tesoros, dominios de Urcaguary

Mitos, leyendas y creencias

A raíz de la escasez de información adicional, Urcaguary es una divinidad que tiene contados mitos, leyendas y creencias.

A continuación, se mencionará la siguiente leyenda:

Urcaguary y la cueva Pacaritambo

Según una leyenda inca, Urcaguary vivía en el cerro Tamputoco, dentro de la cueva Pacaritambo. La antedicha cueva es la misma por donde salió Ayar Manco (Manco Cápac) y sus hermanos.

Como se vio en la etimología de la divinidad, el término Urqu hace un énfasis sobre las montañas, que son los lugares donde la deidad reside. En cuanto a la palabra Wari, una de las posibles interpretaciones del término se relacionaba con lo primitivo. Esto último cobra sentido, puesto que la divinidad de los tesoros ya existía desde una época primigenia.

Seres mitológicos andinos semejantes

Dentro de la extensa mitología andina, las semejanzas entre un ser divino y otro son muy comunes. Urcaguary no es la excepción en este ámbito.

A continuación, se nombrarán algunas divinidades o seres divinos semejantes a Urcaguary:

Hurkaway

Dentro de lo que comprende el Uku Pacha, se encuentra una divinidad conocida como Hurkaway.

Esta divinidad es descrita como una serpiente gigante que mora en las profundidades del Uku Pacha. Hurkaway es la divinidad que representa a todo lo que había en dicho lugar, así como también, a los seres que habitan en ella.

Otra representación que tiene Hurkaway es la de una criatura que se compone de una mujer con características de serpiente.

Hurkaway cumple su función de proteger el Uku Pacha, por lo que es considerada como una divinidad guardiana.

Las semejanzas entre Urcaguary y Hurkaway son las siguientes:

  • Ambas son deidades que son representadas por serpientes.
  • Ambas habitan en las profundidades de la tierra (Uku Pacha).
  • Ambas son divinidades consideradas guardianas.
  • El nombre de ambas divinidades es bastante similar.

Hurkaway, guardiana del Uku Pacha

Uscaiguai

Si se quiere mencionar algunos seres mitológicos andinos de aspecto semejante a Urcaguary, se tiene que hacer un énfasis a la criatura mítica conocida como Uscaiguai.

Se trata de una serpiente divina, la cual su existencia fue aludida en algunos textos por parte de los cronistas y de los extirpadores de idolatrías de los siglos XVI y XVII.

Las características de esta criatura mítica era su formidable aspecto, pues tiene parte de serpiente, felino y venado.

Los agustinos en la relación de idolatrías de Huamachuco mencionan que, en el tiempo de Chalcuchímac (uno de los principales generales de Atahualpa), existía un demonio en forma de serpiente. Esta era colosal, robusta y tan extensa que de la cabeza era imposible visualizar su cola. También tenía pelos y su cabeza era como de un venado. Este ser se llamaba Uscaiguai, era venerado y temido por los nativos, quienes querían hacerse ricos con él porque llevaba oro sobre su cola. Uscaiguai apareció una vez diciendo que quería subir al cielo, y así, en presencia de los nativos, comenzó a elevarse hasta que ellos lo perdieron de vista. Para rememorar este hecho se celebraban diversos juegos, los cuales fueron prohibidos posteriormente por los curas por considerarlos como actos idólatras.

Las semejanzas entre Urcaguary y Uscaiguai se encuentran en los siguientes puntos:

  • Ambas criaturas comparten su aspecto ofídico.
  • Ambas serpientes tienen cabeza de venado.
  • Ambos tienen oro y joyas preciosas enlazadas en sus colas.
  • El nombre de ambas serpientes es muy similar.

Uscaiguai

Venado encantado de Carcas

Se menciona que, en Carcas, pequeño poblado del distrito de Chiquián en la provincia de Bolognesi, existe un cerro conocido como Huayna. En su interior está presente un majestuoso tesoro que los incas escondieron de la codicia de los españoles. El Dios Sol ordenó que un venado corpulento, de hermosa piel y relucientes cuernos, debía tener la eterna misión de cuidarlo.

Desde entonces, el bello animal custodia los parajes del antedicho lugar, restringiendo que cualquiera llegue a descubrir la entrada de la caverna. Pero el demonio una vez estuvo a punto de dar con ella. Y por eso, el audaz venado, emprendió contra él una batalla feroz. En las crudas épocas de invierno, cuando la tierra queda inmersa en una melancólica nebrina, y el rocío cae tristemente de las hojas, la batalla cobra un sentido más encarnizado. Durante las noches lóbregas y heladas, el cerro se estremece ante el fragor de la sangrienta pelea, fragor que silencia el estrépito de las torrentosas aguas de los tres arroyuelos que surcan el lugar. A pesar de la ferocidad del demonio, el formidable guardián de brillante piel y empinadas astas, logra vencerlo, y el enemigo vencido aumenta el caudal de uno de los arroyuelos.

También se menciona que una vez, dos cazadores habían seguido los rastros de un venado. Después de una agobiante excursión, habían llegado a la boca de una cueva, en la cual las huellas se dirigían hacia su interior. Ingresaron viéndose asistidos por una antorcha para alumbrar el sombrío pasadizo y a su luz pudieron visualizar esqueletos humanos, potes y otros objetos de alfarería. Temerosos, decidieron a abandonar la enigmática cueva. En el interior, al acometer el regreso a sus chozas, uno de ellos resbaló y al incorporarse apoyándose con las manos en el suelo remojado por las lluvias, descubrió una galería subterránea. Al adentrarse en ella, notaron que estaba repleto de alhajas de oro y piedras preciosas. Estupefactos por tal descubrimiento, quisieron cargar con todas las riquezas. En eso, al atisbar por el campo, vieron a un venado de singular gallardía, pero ni se les ocurrió darle caza. Anduvieron por los alrededores en busca de un burro para cargar a sus viviendas la fortuna, pero con la suerte jugándoles en contra, no pudieron dar con uno. Entonces, fueron al sitio donde habían encontrado la galería, con la intención de llenar sus alforjas con las joyas, mas no pudieron dar con ella. En una búsqueda desesperada se perdieron, y nadie supo el paradero de ambos. El venado que había sido divisado anteriormente, y que no era otro que el suspicaz guardián de la ubérrima riqueza (el venado encantado de Carcas), los había transformado en dos arroyuelos que empezaron a correr junto al que ya existía, el cual era fruto de la transformación de los demonios a quienes el impetuoso animal, había logrado derrotar en anteriores encuentros.

Al igual que Uscaiguai, el venado encantado es un mito que toma lugar después de la caída del Imperio Inca. A raíz de esto, tanto Uscaiguai como el venado, pueden ser versiones posteriores de la divinidad de los tesoros.

Las semejanzas entre Urcaguary y el mítico venado son las siguientes:

  • Ambas criaturas son representadas por un venado.
  • Ambas criaturas tienen como propósito ser guardianas de riquezas.
  • Ambos seres están relacionados con las cuevas y paisajes subterráneos.

Venado encantado de Carcas

Imágenes usadas

Referencias

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